A. LANGE & SÖHNE – RICHARD LANGE “POUR LE MERITE”
Tras el lanzamiento de la primera colección de la era moderna de A. Lange&Söhne en 1994,el LangeTourbillon “Pour le Mérite”se convirtió rápidamente en uno de los más emblemáticos de la manufactura sajona (solamente por detrás del icónico Lange 1) y en un símbolo la excelencia técnica de sus relojeros, gracias al uso de un sistema de uso y caracol para lograr un par constante en la transmisión de energía del barrilete al rodaje.
Desde entonces, el apelativo “Pour le Mérite” ha servido para denominar a los relojes dotados de esta complicación –cuatro hasta el momento–, representantes de la vanguardia tecnológica de A. Lange&Söhne.
Lanzado en 2009, el modelo Richard Lange“Pour le Mérite” combinaba una aparente sencillez formal –su esfera ofrecía sencillamente unaindicación de hora, minutos y pequeños segundos– con una gran complejidad técnica que, sin embargo, se percibe solamente a través del cristal de zafiro del fondo.
Recientemente, A. Lange&Söhne ha enriquecido la línea con un nuevo Richard Lange “Pour le Mérite”en oro blanco, que se une a las variantes existentes hasta el momento en oro rojo y en platino.
La nueva caja, de 40,5 milímetros, es la propia de la colección, con su bisel ligeramente redondeado, su carrura plana y sus cuatro estilosas asas, largas y estilizadas. Un cristal de zafiro dotado de tratamiento antirreflejos permite admirar la esfera del reloj, que en esta ocasión ha adoptado un elegante color negro mate. Está estructurada en dos niveles, y cuenta con doce clásicos numerales romanos en blanco, acompañados de una discreta minutería. Una vez más, son los cuatro únicos numerales rojos –relativos a los 15, 30 45 y 60 minutos–, los encargados de ofrece un sutil contrapunto de color a la esfera blanca y negra. A las seis horas se ha situado el segundero pequeño, decorado con un guilloché concéntrico y dotado de una clásica escala de ferrocarril, complementada por diez numerales arábigos.
Completa la imagen del reloj una correa de piel de aligátor negra cosida a mano,rematada por un cierre de hebijón elaborado en oro blanco.
Movimiento de precisión
Una vez más, el discreto protagonista del Richard Lange “Pour le Mérite” es el calibre de manufactura Lange L044.1, capaz de garantizar un par de fuerza constante y, en consecuencia, una amplitud del volante inalterable a lo largo de toda la duración de la marcha. El sistema utilizado para lograrlo consiste en una cadena –en sustitución del tradicional muelle real– y una pieza en forma de cono: el citado caracol.
Cuando está dada toda la cuerda, la cadena tira desde la punta del caracol(es decir, desde la palanca más corta);por el contrario, cuando queda menos cuerda y la fuerza de tracción va disminuyendo,la cadena tira desde la parte más ancha del caracol (y, por lo, tanto desde la palanca más larga), de manera que se produce un efecto compensatorio.
La sencillez conceptual de este sistema, frecuentemente utilizado en los relojes de bolsillo, contrasta con la dificultad técnica que supone su aplicación a los relojes de pulsera, un reto que nadie había afrontado antes de hacerlo A. Lange&Söhne con su primer “Pour le Mérite”.
Compuesta por 636 piezas, la cadena tiene 15,6 cm de longitud y es capaz de arrastrar un peso de dos kilogramos, a pesar de su grosor de sólo un cuarto de milímetro. Para evitar que se vea excesivamente exigida y pueda deteriorarse o romperse, dos mecanismos separados bloquean el sistema antes de que esté toda la cuerda dada y antes de que se gaste toda la cuerda.
El accionamiento por cadena y caracol tiene como consecuencia que el caracol gire en una dirección al dar cuerda y en la dirección contraria cuando la cuerda se va gastando. Así pues, es necesaria una construcción que garantice que el accionamiento del reloj no se verá interrumpido cuando se da cuerda. De ello se encarga un sofisticado engranaje planetario situado en el interior del caracol, compuesto por 38 minúsculas piezas que el relojero tiene que colocar en un espacio de sólo 8,6 milímetros.
Más allá de garantizar la transmisión constante de fuerza, el sistema de cuerda y caracol ofrece una reserva de marcha de 36 horas con toda la cuerda dada.
El calibre L044.1 está formado por 279 componentes (por supuesto, sin contar la cadena) y cuenta con 33 rubíes. Impulsado por una espiral de fabricación propia, el volante del movimiento late a 21.600 alternancias por hora y permite ajustar con precisión el momento de inercia al par de accionamiento del caracol mediante cuatro tornillos de oro macizo.
Como es preceptivo en todos los relojes de la manufactura, el movimiento presenta todas las características propias de la relojería sajona, desde la presencia de un cuello de cisne al uso de la platina de tres cuartos de alpaca natural, pasando por los grabados del puente del volante así como en el puente de la rueda del áncora y de la rueda del segundero. Asimismo, todos los componentes han sido delicadamente embellecidos por los artesanos de la manufactura con distintos motivos, como el satinado perlado o las Côtes de Genève. Incluso la cadena ha sido pulida en la parte superior.
El nuevo Richard Lange “Pour le Mérite” se comercializa en una edición limitada a 218 ejemplares, cantidad que remite a la cifra actual de puntos de venta en los que se pueden adquirir los relojes de A. Lange&Söhneen todo el mundo.