PARMIGIANI FLEURIER TORIC CHRONOMÈTER

Hace poco más de 10 años, en concreto el 29 de mayo de 1996, Michael Parmigiani fundó su propia firma relojera en colaboración con la fundación de la familia Sandoz. En 1999 se creó  el primer reloj con el nombre de la marca estampado en la esfera, el Kalpa Hebdomadaire, pero parece ser que el primer reloj que diseñó Michael Parmigiani fue el Toric.

El primer diseño del “relojero de las manos de oro” es la fuente de inspiración del Toric Chronomètre, un miembro selecto del club de la Alta Relojería que ha sido rediseñado para superar los límites del tiempo. Es un reloj muy clásico, que utiliza el lenguaje estético de la Antigua Grecia en la construcción de la caja. Para la manufactura de Fleurier, el pasado es una fascinante fuente de inspiración porque resiste el paso del tiempo, una de las preocupaciones de esta joven manufactura junto con la precisión.

La caja de 40,8 mm de diámetro y 9,5 mm de altura se versiona en oro blanco y oro rojo. Su forma es estirada, perfectamente armónica, según los cánones clásicos. El contorno es el que le imprime un diseño más dinámico, además de su bisel estriado; se han rediseñado los acabados y potenciado la ergonomía de las asas para que sea más cómoda y se adapte mucho mejor a la muñeca, y la corona es mucho más imponente. A pesar de todos estos retoques para depurar su estilo, la caja conserva todo el ADN de la colección Toric.

El bisel estriado es el marco perfecto para una esfera que irradia elegancia. Parmigiani ha diseñado una esfera muy clásica, discreta y sin ningún artificio. Disponible en blanco graneado o negro opalino, el rostro del reloj Toric Chronomètre tiene una sutil textura que se ha realizado cepillando de forma manual la superficie con una mezcla de sal y polvo de plata. Los números árabes son sutiles, como también lo es su minutero ferrocarril, y las agujas son largas con forma de jabalina. El único elemento que llama la atención es la ventana de fecha, que contrasta por su color, en negro en la esfera blanca y en blanco en la esfera negra.

La cronometría es una de las grandes preocupaciones de Parmigiani y sus mecanismos son mucho más que el alma del reloj. Se fabrican de forma artesanal en Vaucher Manufacture Fleurier (VMF) que mantiene viva la tradición, pero también cuenta con un Departamento de Investigación y Desarrollo. El mecanismo que encontramos en el interior del reloj Toric Chronomètre es automático, formado por 220 piezas, de las que 32 son rubíes, con una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias/hora) y una reserva de marcha de 66 horas. Indica horas, minutos, segundos y fecha. El calibre PF331 ha sido manufacturado in house y es preciso y fiable. Lleva grabado un número de certificación que le hace único.

Como todos los relojes de Parmigiani, la correa es fabricada por Hermès. En el Toric Chronomètre es de piel de aligátor en negro o marrón, según versión.

Recommended Posts