REBELLION TIMEPIECES WEAP-ONE

Desde la aparición del automóvil, la relojería ha tejido unos lazos irrompibles con este sector. La lista de firmas relojeras vinculadas con las carreras de cualquier tipo o marcas de coches es cada vez más larga y, en algunos casos, las sinergias son tan fuertes que innovaciones tecnológicas saltan de los coches a los relojes. Rebellion Timepices no se ha asociado con nadie y no depende de nadie. Tiene su propio equipo, Rebellion Racing, y todos los avances tecnológicos que desarrolla para sus coches de carreras los aplica después a sus relojes. Se podría decir incluso que sus coches nacen en los circuitos.

Fundada en 2008 por un industrial apasionado por la alta tecnología, la relojería y los coches, Rebellion Timepieces concentra lo mejor de los dos mundos. El último reloj que en el que aplica este know-how es Weap-One y con él, Rebellion Timepieces rompe con las formas tradicionales de la relojería.

Weap-One tiene la forma de un tubo y es desmontable para que el reloj se integre en un tablero de instrumentos. Su mecanismo tourbillon ha sido realizado en colaboración con Concepto y diseñado por Fabrice Gonet.

El tourbillon de 12,6 mm de diámetro es el protagonista de este reloj que indica las horas y minutos con rodillos. Un diferencial de velocidad permite al tourbillon volante de 60 segundos girar sobre múltiples ejes con lo que el mecanismo de carga manual es extremadamente resistente a la fuerza de la gravedad.

El calibre está compuesto por 529 componentes, de los que 67 son rubíes. Mide 21,4 mm de diámetro, su volante late a 21.600 alternancias/hora y su reserva de marcha es de 50 horas.

El reloj Weap-One tiene dos coronas: la de la derecha es para cargar el mecanismo y la de la izquierda para la puesta en hora.

Su vanguardista caja de titanio con cristal de zafiro antirreflejante tiene forma de tubo y mide 40 mm de longitud y 25 mm de diámetro.

Su brazalete es de cuero negro por la parte exterior y rojo por el interior.

Weap-One es un reloj tecnológicamente avanzado y exclusivo y Rebellion Timepices solo ha creado 10 ejemplares.

Rebellion Timepices debutó en 2008 en la Feria de Basilea nada menos que con 5 calibres propios, un estreno triunfal y sorprendente de una firma que se vanagloria de su independencia y del rendimiento extraordinario de sus relojes. Sus creaciones son una manifestación de su pasión por la relojería y las carreras de coches y solo hay que ver el audaz diseño de sus relojes y sus desafíos técnicos.

La firma afincada en Lonav, a orillas del lago de Ginegra, produce sus relojes en series muy limitadas. Sus diseños son complejos y de una personalidad fuera de lo común que plasma en un gran abanico de materiales: titanio, carbono, oro, acero y cerámica. Las cajas y los componentes de sus mecanismos los fabrica en centros CNC de 5 ejes de alta precisión.

Por Purificación Álamo