Zenith
Defy Skyline Chronograph

A principios de 2022, Zenith presentó una nueva colección dentro de la familia Defy, inspirada en el revolucionario modelo homónimo que en 1969 se había avanzado indiscutiblemente a su tiempo al introducir una robusta caja multifacetada de acero, dotada de un bisel de 14 lados. Esta nueva línea recuperaba la forma octogonal de la caja original –si bien con un diseño totalmente renovado que evocaba los paisajes urbanos–, así como la forma geométrica del bisel, que sin embargo perdía dos lados respecto a la referencia de 1969. Técnicamente, el reloj destacaba por el uso del ilustre movimiento automático de alta frecuencia El Primero –nacido, precisamente, el mismo año que el Defy–, pero sin la función de cronógrafo.
Los amantes de esta complicación –sin duda, una de las más apreciadas de la relojería– han tenido que esperar dos años para descubrir el Defy Skyline Chronograph, un modelo que aúna la elegancia propia de la colección con la deportividad consustancial del cronógrafo.
La caja octogonal propia de la colección se presenta elaborada en acero y ha crecido hasta los 42 mm, un dato destacable, ya que escapa de la tendencia actual de diámetros más contenidos. Con una clásica construcción de tres cuerpos –bisel, carrura y fondo–, ofrece una complejidad formal que no es fácil de percibir a primera vista. El bisel es circular en la parte superior, pero cuenta con 12 lados rectos en el lateral. La transición entre ambas formas –circular y dodecagonal– se produce mediante un biselado que recorre todo su perímetro. Para acentuar la combinación de formas, el anillo superior presenta un acabado satinado vertical, mientras que el biselado y los 12 lados han sido pulidos.

El calibre automático de manufactura El Primero 3600.
La carrura destaca por su diseño angulado, con ocho lados laterales totalmente rectos, apenas suavizados por una faceta en la arista superior. En el lado derecho encontramos una gran y compleja corona tendencialmente pentagonal, rematada por una gran estrella de cinco puntas facetada, emblema de Zenith. Está flanqueada por dos grandes pulsadores alargados, de base irregular.
La carrura y todos sus elementos mantienen la combinación de superficies satinadas con trazos verticales y pulidas, que confiere al conjunto un carácter más sofisticado. El fondo está atornillado a la carrura y, como el bisel, presenta 12 lados en su perímetro. En su zona interior, cuenta con un gran cristal de zafiro que permite admirar las evoluciones del calibre de la familia El primero que late en el interior de la caja. Fiel a su origen deportivo, el Defy Skyline Chronograph ofrece una resistencia al agua de 100 m.
Disponible, de momento, en color azul, negro o plateado, la esfera del reloj destaca por el motivo de estrellas –en este caso, de cuatro puntas– propio de la colección, que ocupa toda su superficie. Presenta unos grandes índices horarios rodiados en aplique, con forma de lingote y recubiertos de Super-LumiNova en la zona central, así como una sencilla escala de minutos y segundos, con cuatro subdivisiones por unidad. Entre los marcadores horarios de las 4 y las 5 horas, encontramos una gran ventana de fecha. El realce interior de la esfera, de doce caras, aloja una escala de diez segundos, que permite una contabilización sencilla de las décimas de segundo mediante la trotadora central.

En la mejor tradición de los cronógrafos Zenith equipados con un calibre El Primero, los tres contadores –los totalizadores de minutos y segundos del cronógrafo, y el segundero horario– son de grandes dimensiones y están ligeramente solapados. Asimismo, su superficie aparece decorada con un “guilloché” de círculos concéntricos que le confiere un efecto soleado.
Las agujas de horas y minutos son las propias de la colección, con tres marcadas facetas y una ranura central recubierta parcialmente de Super-LumiNova, mientras que la trotadora central es un fino estilete decorado con una estrella en el contrapeso. Como detalle del diseño, las agujas relativas al cronógrafo tienen la punta coloreada de rojo para evitar confusiones en la lectura de las indicaciones.
Bajo la esfera late a unas endiabladas 36.000 alternancias por hora el calibre automático de manufactura El Primero 3600, introducido en 2019 para celebrar el 50º aniversario del legendario movimiento. Dotado de 35 rubíes y de la certificación de cronómetro, cuenta con un mecanismo de cronógrafo cuyas funciones –accionamiento, parada y vuelta a cero– se organizan alrededor de una rueda de pilares. Un único barrilete le proporciona una reserva de marcha de 60 horas, una de las mejoras más destacables respeto a las versiones anteriores del calibre. Una función de parada de los segundos facilita una puesta a cero más precisa de la hora. El responsable de generar la energía para alimentar el tren de rodaje es un espectacular rotor con forma de estrella de cinco puntas.

Más allá de su fiabilidad y precisión, el calibre El Primero 3600 destaca por unos acabados que le confieren una imagen dinámica y contemporánea, con preeminencia de superficies satinadas con diferentes trazos. Los tornillos presentan un acabado azulado, en la mejor tradición suiza, igual que la rueda de pilares. La majestuosa masa oscilante alterna superficies lisas y satinadas, y está rematada por la leyenda “Zenith Manufacture”.
Igual que los modelos anteriores de la colección, el Defy Skyline Chronograph está equipado con un elegante brazalete de acero formado por tres filas eslabones planos, íntegramente satinados, que se ciñe a la muñeca con un cierre desplegable. Un sistema de cambio rápido permite, sin embargo, liberarla solamente pulsando un botón, y sustituirla por una correa auxiliar de caucho decorada con un motivo de estrellas.
Más información en: zenith-watches.com