CASA RAFOLS

Textos: Juan Antonio Gómez

Detrás de las puertas de Casa Rafols se esconde mucho más que los deliciosos manjares por los que les conocemos —y por los que hoy venimos a convenceros de que les visitéis—. Fundada en 1911, lo que en un principio era una ferretería se acabó convirtiendo en el aclamado restaurante que es hoy en día. Ellos aseguran que el resultado actual es todo un sueño cumplido —más o menos lo que sentiréis si probáis su risotto de pasta de sémola con tartufata o sus croquetas de setas—, y nos sorprenden aún más al contarnos que, durante la Guerra Civil, su sótano se convirtió en un comedor secreto. Ya sea por ese espíritu clandestino “con alma de jazz” que heredaron de aquella experiencia y que aún poseen o por sus tapas y platos, está claro que Casa Rafols es todo un must en la lista de joyas gastronómicas de Barcelona. De estilo mediterráneo y tradicional, la carta da al comensal la posibilidad de picotear y compartir platos como su excelente tortilla, hecha al momento, o su centro de paleta ibérica de bellota. Si picar no es lo vuestro, no os preocupéis: hay un sinfín de opciones individuales, de entre las que destacan los pescados y mariscos y las carnes, que incluyen delicias como los tacos de solomillo con panceta ibérica, hongos y foie. Dirigida por el chef vasco Txemi Andrés, la cocina de Casa Rafols merece, sin duda, ser saboreada, así que no le neguéis este placer a vuestro paladar y pasaos por allí, recordad: si lo hacéis al mediodía, ¡podéis disfrutar de su fórmula del día!

Información

Dirección:
Ronda Sant Pere, 74
08010 Barcelona

Teléfono:
936 258 200

Web:
balcastro.com/casa-rafols

Horario:
Lunes – domingo de 09.00 a 01.00 h.

Precios:
25-45 €